Segunda República, malos tiempos y ¿malos políticos? complicado. ¿A La Tercera Republica? está claro, la clase política no puede ser peor. Sin regeneración política, pocas ganas. Fuera privilegios insultantes, disminuir parásit@s o sea chiringuitos, senado por ejemplo, y los miles que hay por toda la geografía; listas abiertas; un sistema electoral lo menos perverso posible. Ah! fuera los a dedo y si hay corrupción demostrada que devuelvan el dinero, y esta claro que este sistema económico que nos ha llevado donde nos ha llevado, se debe repensar sino todo será la misma eme con otra clase de reyes y reinas.

 ¿Cuántos días llevamos de pandemia? y ellos, ellas, la clase política, tan frescos, frescas.

Evidentemente las leyes hay que cumplirlas o los decretos, o lo que sea, si hay acuerdos privilegios políticos insultantes para la mayoría de la población, estos  deben de revocarse mediante acuerdos, esta claro. Pero ¿voluntad hay? Porque los que predican desobediencia, ojo que les mienten sus bolsillo, ¿ojo! y al resto los de la casta casposa siguen y los que despertaron esperanzas más casposos si cabe.